Los hogares latinos en los que se habla español y que tratan de contactar a los centros de llamadas de Medicaid en Florida se enfrentan a horas de retraso, según muestra una nueva investigación, lo que pone en peligro la capacidad de esas instituciones para proporcionar información crucial para evitar que las personas sean expulsadas del programa de seguro federal.
La investigación de UnidosUS, la mayor organización nacional de defensa de los derechos civiles de los hispanos, muestra que una persona que llama en español tiene que esperar casi cuatro veces más que alguien que llama en inglés para poder hablar con un representante en el centro de llamadas de Medicaid de Florida. Además, muchas veces la llamada se corta.
Según el informe publicado el jueves, casi un tercio (30%) de todas las llamadas en español se desconectaron antes de que la persona que llamaba pudiera hablar con un representante, en comparación con solo el 10% de las llamadas en inglés.