Donald Trump regresará a la presidencia de Estados Unidos, tras imponerse a Kamala Harris, la candidata demócrata y actual vicepresidenta. En una contienda ajustada y polarizada, la candidatura de Trump, apoyado por JD Vance como su vicepresidente, aseguró su triunfo con victorias decisivas en varios estados clave, marcando una nueva era de liderazgo en el país.
La reelección de Trump con 295 votos electorales se debió en gran medida a su éxito en los llamados estados bisagra o «swing states», donde los votantes no muestran una clara preferencia por uno u otro partido. Entre estos estados se destacan Florida, Pensilvania y Arizona. En Florida, Trump obtuvo una ventaja de aproximadamente más de dos millones de votos sobre Harris, mostrando un apoyo sólido en una región clave para los republicanos.
Pensilvania fue otro de los territorios decisivos, con Trump logrando una ligera ventaja en áreas suburbanas que habían favorecido a Biden en 2020. En Arizona, un estado tradicionalmente conservador pero que en 2020 votó a favor de Biden, Trump logró revertir el voto, apoyado por un crecimiento de votantes independientes y descontento con la administración actual.
El regreso de Trump a la presidencia marca un punto de inflexión en la política estadounidense. Su administración se centrará en consolidar políticas que sigan la línea de su mandato previo y aborden temas críticos como la economía, el control migratorio y la seguridad nacional. Sin embargo, también enfrentará el reto de gobernar un país profundamente dividido, con una población que espera soluciones efectivas a problemas como la inflación y la inseguridad.
Senado: Republicanos obtienen una ligera mayoría
Las elecciones de 2024 no solo determinaron la presidencia, sino también el control del Senado, donde los republicanos obtuvieron una mayoría estrecha. Esta victoria en el Senado es especialmente significativa para el presidente electo Donald Trump, pues le brinda una plataforma legislativa alineada para implementar su agenda de manera más fluida.
Con esta mayoría, los republicanos tienen ahora la capacidad de aprobar legislación sin una fuerte oposición en el Senado, lo cual será crucial para temas que Trump ha destacado como prioritarios, como la reforma de inmigración, recortes impositivos y medidas enérgicas en seguridad fronteriza.