Orlando Al Día Un tiroteo en el campus de la Universidad Estatal de Florida (FSU), ubicado en Tallahassee, terminó con un saldo de dos personas muertas, seis heridas y el presunto atacante hospitalizado. Las autoridades confirmaron que las víctimas fatales no eran estudiantes.
La comunidad universitaria permanece conmocionada, mientras las investigaciones avanzan y las clases siguen suspendidas. La Policía de Tallahassee identificó al sospechoso como Phoenix Ikner, un estudiante de 20 años e hijo de una agente del alguacil del condado de Leon.
BREAKING: The suspect in the FSU shooting is the 20-year-old son of a current sheriff’s deputy who had access to one of her weapons, according to Leon County Sheriff Walt McNeil.https://t.co/8qAT5g6qhH pic.twitter.com/PzrK5L9bII
— MSNBC (@MSNBC) April 17, 2025
El jefe policial Lawrence Revell explicó que el joven no obedeció las órdenes de los agentes antes de que alguien le disparara. Ikner permanece hospitalizado. El sheriff del condado, Walt McNeil, indicó que Ikner había tenido acceso a un arma de su madre, quien actualmente presta servicio activo.
El joven formaba parte del Consejo Asesor Juvenil de la oficina del alguacil. McNeil calificó la situación como trágica y aseguró que trabajarán para garantizar que hechos similares no se repitan.
Hallan múltiples armas y aseguran el campus
Los oficiales recuperaron varias armas relacionadas con el ataque. Encontraron una pistola en posesión del sospechoso, una escopeta dentro de la unión de estudiantes de FSU y otra arma de fuego en el auto de Ikner. Aunque Revell aclaró que el atacante no disparó contra los agentes, la situación se consideró de alto riesgo hasta que lograron neutralizarlo.
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Las autoridades locales creen que Ikner actuó solo. Tres funcionarios de las fuerzas del orden confirmaron a CNN que no buscan a otros sospechosos. El campus permanece bajo resguardo policial, con clases y eventos cancelados hasta nuevo aviso. Las autoridades instan a la comunidad estudiantil a evitar la zona donde se mantiene activa la investigación.
Reacción y medidas posteriores
El tiroteo reaviva el debate sobre la seguridad en instituciones educativas y el acceso a las armas. “Esto nunca se tolerará en el condado de Leon, en Florida ni en ningún lugar del país”, afirmó McNeil en una conferencia de prensa. La universidad y los organismos policiales continúan colaborando para brindar apoyo a los afectados y reforzar las medidas de seguridad en el campus.
Las autoridades aseguran que la situación ya está bajo control. Sin embargo, el impacto emocional y social del tiroteo seguirá presente mientras se esclarecen los motivos detrás del ataque.
