Una nube de polvo del Sahara llegará a Estados Unidos esta semana

Una nube de polvo del Sahara llegará a Estados Unidos esta semana

Una extensa nube de polvo del desierto del Sahara ha comenzado a cruzar el Atlántico, avanzando desde el Caribe hacia el sureste de Estados Unidos. Esta concentración de partículas representa uno de los eventos de polvo sahariano más grandes del año y podría impactar la calidad del aire y la visibilidad en varios estados durante los próximos días.

La nube de polvo proviene de la Capa de Aire del Sahara, una masa de aire seca y cálida que se forma sobre el desierto africano. Esta capa arrastra partículas de polvo fino a gran velocidad a través del océano Atlántico, sobre todo entre abril y octubre. Durante este trayecto, las columnas de polvo se elevan entre 5,000 y 20,000 pies sobre el nivel del mar.

En promedio, los meses de junio y julio presentan las concentraciones más altas de este fenómeno. A medida que el polvo avanza hacia el Caribe y América del Norte, su composición puede influir en las condiciones atmosféricas y, en algunos casos, interrumpir la formación de tormentas tropicales.

Impacto en el Caribe y advertencias de salud

La nube de polvo actual ya cubrió gran parte del Caribe, desde Jamaica hasta Barbados y desde las Islas Turcas y Caicos hasta Trinidad y Tobago. Con una profundidad óptica de aerosol de 0.55, esta columna alcanzó la mayor concentración de partículas registrada en lo que va del año, según datos del Servicio Meteorológico Nacional en Puerto Rico.

En varias islas, los cielos brumosos provocaron efectos adversos en la salud, como estornudos, tos y ojos irritados. Las autoridades meteorológicas recomendaron que las personas con asma, alergias u otras afecciones respiratorias permanezcan en interiores o utilicen mascarillas si deben salir al exterior.

Cuándo y dónde afectará en Estados Unidos

Según proyecciones de AccuWeather, la nube de polvo alcanzará partes del sureste de Estados Unidos, incluyendo Florida, Alabama, Mississippi y Louisiana, a finales de esta semana y durante el fin de semana. Aunque el polvo pierde parte de su densidad al cruzar el Caribe, aún puede reducir la calidad del aire y provocar cielos nublados o atardeceres rojizos.

En zonas como la Costa del Golfo y la península de Florida, es posible observar una ligera disminución de la visibilidad y un aumento de la concentración de partículas en el aire, lo que puede afectar especialmente a personas sensibles a contaminantes atmosféricos.

Efectos secundarios: menos huracanes, más atardeceres espectaculares

Aunque el polvo sahariano suele generar molestias, también cumple una función meteorológica importante. Su aire seco inhibe la formación de ciclones tropicales, lo que reduce temporalmente el riesgo de huracanes en el Atlántico.

Además, este tipo de fenómenos mejora la visibilidad de ciertos colores en el cielo. Durante la llegada del polvo del Sahara, los amaneceres y atardeceres suelen volverse más intensos y rojizos, gracias a la dispersión de la luz solar en partículas suspendidas en la atmósfera.

Qué ocurrió con la “nube Godzilla”

En junio de 2020, una de las nubes de polvo más densas en décadas cruzó el Atlántico y alcanzó América con niveles sin precedentes. Llamada popularmente la “nube Godzilla”, su densidad y tamaño sorprendieron a los expertos y dejaron un precedente para la vigilancia de este tipo de eventos.

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Aunque el episodio actual no alcanza la magnitud de la nube de 2020, los meteorólogos continúan monitoreando su desplazamiento, ya que podría coincidir con el inicio activo de la temporada de huracanes del Atlántico, que se extiende del 1 de junio al 30 de noviembre.

Recomendaciones para protegerse

  • Evita actividades al aire libre si tienes problemas respiratorios o alergias.

  • Utiliza mascarilla si necesitas salir en zonas afectadas por polvo.

  • Mantén las ventanas cerradas para evitar que las partículas entren al hogar.

  • Consulta fuentes oficiales como el Servicio Meteorológico Nacional para reportes actualizados sobre calidad del aire.

El seguimiento de este fenómeno continúa en curso. Las autoridades climáticas en Estados Unidos mantienen vigilancia sobre su avance y posible impacto.

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