Dos días después de la jornada electoral, con contiendas clave tanto en la Cámara de Representantes como en el Senado todavía por decidir, entre ellas las de Arizona.
El escrutinio avanzó muy poco durante el miércoles y jueves, lo que evitó que se logren las mayorías suficientes para declarar a un ganador en ninguna de las dos cámaras legislativas.
En el caso de la Cámara Baja, según las proyecciones de los principales medios estadounidenses, los republicanos llevan la delantera al haberse asegurado por lo menos 211 de los 218 escaños que necesitan para controlarla.
Y en el caso del Senado, la situación está mucho menos clara: de los 100 escaños, los demócratas tienen asegurados 48 y los republicanos, 49
Restan más de una cuarentena de contiendas que aún no se han definido.