Hay muchas razones válidas por las que a todos nos gusta pasar tiempo bajo el sol. En primer lugar, la luz del sol aumenta nuestros niveles de serotonina (es el propio Valium de la naturaleza; probado para reducir la ansiedad). No solo eso, sino que produce vitamina D, que es excelente para los huesos, los dientes, la piel, el pelo y las uñas. Sin embargo, todos esos beneficios no compensan el envejecimiento prematuro y los riesgos del cáncer de piel que vienen de la mano con la exposición al sol.
La fotoprotección es un elemento fundamental a incluir en nuestra rutina diaria y no solo cuando vayamos a la playa o a la piscina, sino también en nuestro día a día, cuando vayamos en el coche, cuando realicemos deporte al aire libre. Está demostrado que a lo largo de nuestra vida nos da más sol en el día a día, por ejemplo, al caminar por la calle o en el coche, en zonas de fotoexposición como pueden ser rostro y brazos, de media, que el que podamos recibir en la playa o en la piscina. Un gesto fácil de adquirir en este sentido es utilizar una crema con fotoprotección a diario y será la mejor medida de protección de nuestra piel frente al sol.
Si bien nos encanta tener un bronceado perfecto, es importante recordar que un bronceado es, de hecho, un signo de daño en la piel, y que la producción adicional de melanina es la reacción natural del cuerpo para protegerlo de una mayor exposición al sol. Es por eso que ningún dermatólogo te recomendará broncearte. Sin embargo, a continuación, te dejamos algunos consejos para que tu exposición al sol sea lo más segura posible:
- Aplícate el bloqueador correcto
- Conoce tu tiempo de bronceado
- Busca un poco de sombra
- Cúbrete
- Cambia las cremas aceleradoras de bronceado por suplementos
- Come alimentos amigables con el sol
- Sé consciente de los tiempos
- Revisa tu rutina aftersun
Y por último, pero no menos importante, el chocolate oscuro está repleto de flavonoides que pueden ayudar a proteger contra las quemaduras solares, mientras se cree que la cafeína ayuda a reducir el riesgo de cáncer en la piel. Ya lo sabes: tómate un espresso antes de visitar la playa.